Meg IV

Dos pares de ojos se abrieron de forma especial al ver las fotos, unos pequeños y redondos detrás de unos lentes muy gruesos que se balanceaban delante de una cara redonda y pecosa. La cara de Supermind absolutamente sorprendido quien gracias a este evento casual se encontró advertido de la actual ubicación de su megabot, y los otros pertenecían al que fuera hasta hacìa cinco minutos, el rostro mas bello del mundo antes de la aparición de esa foto “de la “bitch” esta que sale con.... ¿BERTOLDINO???,.... osea, encima de ser mas linda que yo además es la novia del único chico que me besó por mas de 40 minutos?.Aunque haya sido atroz, esto no se puede quedar así”.
Terminando de decir esto Janice (si pues obviamente, esa Janice, la de siempre), emprendió el camino de regreso a su casa hecha una furia y odiando a su peluquero que jamás llegó a ese tono de rubio con su tinte y planeando como quitarle a esa bruja algo que le gustara mucho, algo como una joya o un familiar querido, algo con que hacerle daño por ser mas linda que ella. Luego lo vio bien claro...ese flaquito la amaba a ella y solo estaba con la “mujer maravilla” porque ella lo había choteado así que para en seco y decide, como buena mujer que era “retomar territorio perdido”
Las cosa se desarrollan con total normalidad en la vida de Meg y Bertoldino hasta que una mañana Bertoldino esta en su oficina y recibe la visita de Janice...todos en la oficina se quedan pensando “maldita sea no es posible que este flaco feúcho tenga ese jale con las mujeres espectaculares” mientras la invita a tomar un café en la cafetería del PESOTE. Casi en simultáneo Meg recibe la visita de un nuevo vecino, un ciudadano Norteamericano que dice llamarse Mr. Gat Demm quien es realmente el profesor Dr. SUPERMIND (quien siempre mira a la cámara cuando habla ....que càmara?) disfrazado, quien en un primer momento la desconecta con un control remoto y piensa en llevársela, pero luego de revisar su memoria adquirida de los ultimos meses conversar con ella , descubre lo mucho que a aprendido de la conducta humana con su “amigo” quien parece ser una buena persona así feo y todo. Entonces que decide que ella debe quedarse pues es una excelente oportunidad de observar sus avances y se va no sin antes insertar en la memoria de MEG la actualización de un nuevo programa que estaban desarrollando en robótica de la NASA y que prometía ser el paso definitivo para que la simulación humana fuera un éxito: “Human Feelings Pro para Windows xp“ .Cuando Meg volvió a encenderse sintió. Y vaya que sintió....Y se puso a llorar desconsoladamente sin tener idea de que le estaba pasando y sin saber a ciencia cierta el porque. Totalmente aterrorizada por los trastornos que había comenzado a experimentar se encerró en el armario que usaba al principio. Entonces ocurrió. Meg vio una fotografía de ambos el día del rescate y fijó su atención en Bertoldino e inmediatamente sus circuitos se sobrecalentaron y se enamoró de él. Comenzó a sentir extraños cosquilleos en las piernas y una sensación de cortocircuito en la zona abdominal de su cuerpo. Estaba experimentando algo nuevo que no sabía como manejar. Entró en pánico y salió apresuradamente de la casa a buscar a Bertoldino a su oficina. Cuando llegó en un taxi vio que Bertoldino se despedía de una hermosa mujer que lo besaba en una mejilla y le guiñaba un ojo y luego se metía en una costosa limusina. Meg se acercó a Bertoldino y sin saber porqué le dijo sinvergüenza! y le dio una cachetada con su brazo biónico que lo mandó al hospital. Meg se la pasaba llorando sin saber que hacer y le pedía disculpas por haberle safado la mandíbula , haberle roto el tabique en 7 pedazos y por ese color rojo que no se le iba de la cara ni con caladryl. (si te picas si te rascas) a lo que él reaccionaba riendo y diciéndole que nunca hubiera pensado que algún día su lavadora se pondría celosa a lo que Meg respondía con miradas de odio y mas lágrimas. Cuando le dieron de Alta Bertoldino regresó a casa y Meg lo trataba como el centro del universo. Bertoldino no comprendía muy bien porqué estaba comportándose Meg de esa manera que cada vez veía mas telenovelas y se encerraba en el baño por horas a comer chocolates y a llorar. Los amigos envidiosos de Bertoldino la vieron pensativa en el patio trasero mientras arreglaba las tuberías y le preguntaron porque estaba tan triste y ella sin saber porqué les contó que Bertoldino había besado a una chica que entraba a una limosina y que ella había deseado su cabeza en un plato y que jamás había podido concebir semejante tipo de razonamiento no-racional. Ellos maravillados, se dieron cuenta de que podían manejar esa situación a su favor y comenzaron a echar leña al fuego de los celos de Meg hablándole de la “maravillosa experiencia” que habían vivido “su” Bertoldino con Janice cuando apenas eran unos PRE-adolescentes. “El mas largo beso de la historia, “45 minutos de puro amor y confusión” decían ellos mientras reían a carcajadas y Meg sentía que un fuego interior la consumía mas a cada instante.