Hacía frio pues y ya no me quedaba otra que comprarme un sanguchito con café y llegaron los municipales y empezaron a desalojar a los ambulantes y yo me quedé desafiando la autoridad ahi comprando un café con un pan con Tortilla. Y bueno pues en realidad era un omellete (creo que así se escribe porque homelette me suena bien maricón, pero me suena y eso me tiene maaaal)pero le decía tortilla el casero y el municipal le exig´´ia que se fuera y yo que necio masticaba despacito porque todavía no le había pagado y encima de todo, recontra maligno, le pedí en tono fuerte "A ver pues , dame LA ULTIMA TORTILLA". Asi que el municipal mascó su rrabia mientras pagaba y me retiraba con la última tortilla y elo vendedor desapareció en la turba de vendedores desalojados y yo desafiante fui el último gil en comerse la última tortilla.
Que Dios nos libre de gente como yo.
